Por: I.A Pedro Nel Ramos
Director de mercadeo y ventas
Grüne Welt

La parte aérea de las plantas ha sido debidamente estudiada pero muy poco se conoce de lo que sucede bajo la tierra. Se sabe que la raíz está anclada al suelo y que cumple tres funciones importantes: explorar el sustrato o suelo, crecer, y extraer el agua y nutrientes que requiere la planta para poder crecer.

Crecimiento radicular

La raíz crece en longitud debido a la actividad del meristemo apical, que está protegido por la cofia o caliptra. Los pelos radicales son los responsables de la absorción de agua y sales minerales. Los pelos radicales van apareciendo y desapareciendo a medida que la raíz va creciendo debido a que la zona de maduración siempre está a una distancia más o menos constante del extremo apical de la raíz.

Las raíces laterales se originan después del periodo embrionario y determinan la organización radicular de la planta.

Las raíces adventicias se producen postembrionariamente y surgen de células próximas a los haces vasculares de forma natural o inducida. Esto puede ocurrir en tallos o en hojas o en las propias raíces.

Absorción de agua

La zona meristemática de la raíz en activo crecimiento se halla recubierta por la caliptra y consta de numerosas células pequeñas, prácticamente sin vacuolas. El meristema va creciendo y dejando atrás una zona donde la división celular es menos frecuente, lo que produce una rápida elongación celular y su progresiva diferenciación.

Estudios sobre la absorción de agua por las raíces arrojan que la zona apical absorbe poca agua. Después sigue una zona de longitud variable de máxima absorción y, posteriormente, vuelve a decaer la capacidad de absorción. Dichas variaciones se han explicado con base en la anatomía de la raíz: la zona apical (caliptra y meristema) absorbe poca agua debido a su tejido compacto y a que no posee xilema. La absorción es máxima donde se encuentra xilema diferenciado y las barreras al paso de agua no son tan importantes. A medida que aumenta la suberización de los tejidos la absorción decae nuevamente.

Absorción de minerales

La absorción de los nutrientes minerales por la raíz se determina por tres factores en especial:

  1. La tasa de aporte del nutriente por el suelo hacia la raíz

Esto depende de la concentración de iones en la solución del suelo o en la solución nutritiva en el caso de la hidroponía, de la capacidad buffer del suelo o del sustrato y de la movilidad del nutriente hacia la raíz debido a la difusión y al flujo de masa.

  • Capacidad de absorción del nutriente por la raíz

Depende del volumen de exploración y ramificación de la raíz y de la cantidad de proteínas transportadoras de que dispongan las células radicales. Las raíces pueden llegar a formar estructuras muy ramificadas lo que le permitirá explorar un gran volumen de suelo o sustrato. El proceso de ramificación es dinámico y corresponde a las condiciones de suelo, pudiendo aumentar en volúmenes edáficos en donde hay mayor disponibilidad de los nutrientes más móviles. Por otra parte, para los de escasa movilidad como el fósforo, la planta aumenta la ramificación fina de las raíces y la densidad de pelos radicales cuando su disponibilidad disminuye; a esto se le llama longitud específica de la raíz y es un carácter inducido por la baja disponibilidad de nutrientes como P, Zn, Fe y K y la planta puede aumentarla al asociarse con hongos micorrizantes.

  • La habilidad de la raíz de modificar el entorno edáfico

Para aumentar la concentración de iones, la raíz también es dependiente de la capacidad de absorción pues permite la exudación de ionóforos, metabolitos y proteínas que hacen solubles los nutrientes. En gran medida, también es dependiente de la asociación de la raíz con bacterias y hongos de la rizosfera.

Un bajo crecimiento radicular obligará a un incremento en las dosis de fertilizantes y de las tasas de riego debido a que al tener un menor volumen radicular explorando el suelo las plantas requerirán un mayor suministro de agua y nutrientes. Esta situación determina en algunos casos temporales excesos de humedad, lo que puede llegar a afectar el desarrollo radicular sin que esta baja en el metabolismo signifique la muerte de las raíces.

Las podas pueden ser nefastas en el desarrollo radicular si se elimina más del 30% de las bifurcaciones presentes en la planta o más del 30% de la madera con cambium vivo ya que al eliminar parte aérea se provocará la muerte radicular de la parte simétrica a la eliminada.

Parte de la gran cantidad de sustancias que se mueven en este proceso son las hormonas, que se encargan de regular los procesos metabólicos de las plantas, entre ellos el crecimiento.

La actuación sobre las yemas vegetativas y la ubicación de las que permanezcan será determinante en el desarrollo posterior de la rama o la planta ya que son las propias yemas las que producen estas hormonas, actuando en red con el felodermo y las cofias radiculares.

Teniendo en cuenta lo anterior es importante después de la poda o de una cosecha abundante ayudarle a la planta en ese proceso de recuperación de raíces ofreciéndole un producto como el Raizamil de Grüne Welt.

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