Por: Holman Gamba
R&D Manager

Breve reseña del Manejo Integrado de Plagas (MIP)

Las plagas se encuentran entre los factores limitantes más importantes de la productividad de los sistemas agropecuarios. Trátese de insectos, patógenos o malezas, estos organismos son responsables del 37 al 50% de las pérdidas reportadas en la agricultura mundial (Pimentel et al., 1991; Sweetmore et al., 2001; Oerke, 2005).

A lo largo de la historia y con el propósito de eliminar o contrarrestar estas pérdidas, se han desarrollado diversas tecnologías y se han implementado infinidad de programas de control en todo el mundo. En los últimos 50 años, destaca el Manejo Integrado de Plagas (MIP) entre las estrategias de control, cuya aplicación ha demostrado reducir las poblaciones y daños ocasionados por las plagas al menor costo económico, social y ambiental (Kogan, 1998). No obstante, existen al menos tres hechos que implican que, a pesar de las innovaciones tecnológicas y de los recursos invertidos, el MIP no ha sido una estrategia viable: su adopción ha sido muy baja; los daños ocasionados por plagas a las cosechas no han disminuido a escala global (Oerke, 2005); y, aquí y allá han emergido nuevos paradigmas alternativos al MIP.

Es así que el camino hacia el desarrollo sustentable, cada vez más necesario, plantea retos de gran magnitud para la sobrevivencia de un MIP basado en un enfoque reduccionista. No extraña pues, que varios enfoques se hayan planteado como alternativas al MIP entre los que se destacan programas de MIP Biológicamente Intensivo, Agroecología y Manejo de Plagas, Manejo Ecológico de Plagas, Enfoque Total de Sistema, Manejo Integrado de la Biodiversidad y Producción Integrada, entre otras.

Teniendo en cuenta estas propuestas de manejos alternativos, en los cuales se aborda un nuevo concepto de MIP, es importante indicar que para manejar ecológicamente una plaga es necesario conocer su ecología y la de su entorno, esto es: el patosistema que la plaga forma junto con su hospedante; el agroecosistema que incluye a todos los patosistemas y demás componentes de un campo cultivado; y el ecosistema donde se localizan los agroecosistemas.

Por otro lado, dentro de los diferentes enfoques y conceptos que se han abordado en lo relacionado con el manejo integrado de plagas, el uso de alternativas de origen químico ha jugado un papel muy importante en la ejecución y puesta en marcha de estos enfoques y planteamientos. Desafortunadamente uno de los efectos más notables de las aplicaciones repetidas del mismo producto insecticida (mecanismo de acción), fue la selección de poblaciones resistentes de la plaga, dando como resultado que los agricultores tuvieran que aplicar más y más insecticida para lograr el mismo efecto (Metcalf, 1989). Menos notable, pero no menos importante, ha sido la eliminación de la fauna benéfica que contribuye a la regulación natural de las poblaciones de fitófagos, permitiendo que la plaga objetivo resurja con más fuerza, y que ciertos organismos antes no conocidos como plagas, aparezcan causando daños.

Complejo de artrópodos chupadores elevados a la categoría de super plagas globales

El desbalance de los agroecosistemas en los cultivos, ocasionado por la pérdida de la biodiversidad de organismos benéficos, los cambios micro climáticos, la pérdida de sensibilidad y generación de resistencia al control químico, la reducción de la tasa de innovación de nuevas moléculas químicas sintéticas, la baja tasa de crecimiento de Bioplaguicidas y de Bioinsectidas, así como la falta de integración de tecnologías (Biológicas y Químicas) a través de la rotación, mezcla y co-formulaciones, ha generado que los insectos plaga cambien su biología, su fisiología y sus hábitos dificultando cada vez más su control y manejo teniendo ahora una nueva categoría conocida como la de superplagas.

Una superplaga es una especie de artrópodo plaga (insecto o ácaro) muy especializada o totalmente generalista, capaz de afectar sistemática y significativamente la productividad, la calidad y la competitividad de un cultivo (Valencia, 2018). Las características más relevantes de las superplagas son su alta capacidad reproductiva y de daño, polifagia y alta capacidad de alimentación, rápida dinámica de poblaciones en diferentes fases de desarrollo del cultivo, baja eficiencia de sus enemigos naturales y alta adaptabilidad a las condiciones climáticas, microclimaticas, de manejo y productivas de sus cultivos hospederos, entre otras (Valencia, 2018).

Dentro de las propuestas que actualmente se tienen para el manejo de las superplagas, entre las que se encuentran artrópodos como Thrips, Mosca Blanca, Ácaros y Áfidos, está el uso e implementación de insecticidas químicos selectivos de nueva síntesis, que son específicos para el control de insectos objetivo combinando efectos letales y subletales y con un bajo o nulo impacto en sus enemigos naturales. 

Turbine®: una alternativa dentro del concepto del nuevo MIP y la agricultura sostenible

HELM, una compañía de origen alemán con más de 120 años, tiene el gusto de introducir al mercado colombiano su nuevo producto TURBINE^®. Se trata de un novedoso insecticida de tipo sistémico, con acción translaminar y excelente efecto residual que provee un control sobresaliente en insectos de tipo chupador.

TURBINE^® presenta gran selectividad al control de insectos pertenecientes al Orden Hemíptera (Subórdenes: Heteróptera, Auchenorrhyncha y Sternorrhyncha) y al Orden Thysanóptera. El perfil técnico del producto está direccionado y enfocado al control de plagas tipo chupador, destacando su actividad biológica en especies de Thrips, Mosca Blanca y Áfidos, entre otras.

TURBINE^® tiene la capacidad de regular el comportamiento de los insectos, afectando, entre otras cosas, la motricidad, la capacidad alimenticia y de cópula del insecto (efectos letales y subletales). Adicionalmente NO tiene efecto adverso en insectos benéficos y polinizadores. TURBINE^® tiene una fuerte acción inicial a través de la ingestión (efecto antialimentario), que luego se completa por su efecto de contacto y de contacto-ingestión para una mayor residualidad y contundencia de control. El producto no ha presentado fitotóxicidad en los cultivos ornamentales evaluados si se usa de acuerdo con las recomendaciones técnicas indicadas.

Una de las grandes características de TURBINE^® (ingrediente activo: Flonicamid, Formulación WG) es que es el único insecticida que pertenece al Grupo 29 acorde a la clasificación IRAC, lo cual lo convierte en un producto estratégico dentro de los planes de rotación que actualmente se adelantan para el manejo de plagas de tipo chupador, que afectan a los cultivos ornamentales por no tener ningún tipo de resistencia cruzada con otros ingredientes activos y mecanismos de acción. De esta manera, TURBINE^® se presenta como una excelente alternativa de inclusión en los Planes de Manejo de Cultivos y de Productos, dentro de la estrategia del Nuevo Manejo MIP de los insectos y del Manejo Integrado de la Resistencia de Plagas (MIR) en línea con el Perfil Técnico del Producto, lo cual es consecuente con su Clasificación IRAC actual (Grupo 29):

Su único mecanismo de acción, su excelente perfil ecotoxicológico y su inocuidad sobre organismos polinizadores, le confieren a TURBINE^® una condición única en su clase dentro de la implementación del MIP, para la Conservación y Manejo de la Susceptibilidad de Plagas (Manejo Preventivo de la Resistencia) y en el Manejo de la Resistencia Múltiple y Cruzada del Complejo de Chupadores y Thrips en ornamentales y otros cultivos. 

Su modo de acción es único afectando el Patrón de Comportamiento de los Insectos, por lo cual entra en la categoría de Reguladores del Comportamiento de Insectos (RCI), que conjuntamente con los Reguladores del Crecimiento de Insectos (IGRs), son la nueva frontera de la innovación de los productos de síntesis química.

TURBINE^® afecta en primera instancia el comportamiento alimenticio de este tipo de insectos (chupadores), lo cual lo diferencia de otros modos de acción típicos en el manejo de chupadores tales como los de los neonicotinoides y de los insecticidas eminentemente neurotóxicos.

Efecto anti-alimentario

Efecto de Turbine^® sobre el ciclo de vida de Thrips

Algunos de los síntomas y efectos subletales en los insectos tratados con TURBINE^®, se perciben entre los 15-30 minutos después de la aplicación. Entre los más relevantes se tienen:

• El estilete se vuelve flácido o blando (afectación a las partes bucales del insecto).
• La alimentación se detiene.
• Patas flácidas.
• Se incrementa el movimiento antenal.
• Dificultad para mantener su estabilidad.
• Movilidad errática y no coherente.
• Sensibilidad a la luz mejorada.

Los diferentes sitios de acción que tiene TURBINE^® varían de acuerdo con la especie. Al incluir al producto en un plan MIP se obtiene: 

• Baja presión de selección.
• Bajo riesgo de resistencia en todas sus formas. 
• Se reduce el riesgo de resistencia múltiple y cruzada.
• Efectos sub-letales inmediatos, para una rápida Protección del Cultivo.

Clasificación y evaluación toxicológica y ecotoxicológica

Categoría toxicológica: 

III LIGERAMENTE PELIGROSO – Franja azul.
Periodo de Re-entrada ornamentales: 4 Horas.

Perfil ecotoxicológico

Flonicamid es clasificado como “Prácticamente No-Tóxico” para:

• Organismos Acuáticos. 
• Peces.
• Aves.
• Abejas.

Información general del producto

Nombre Comercial: TURBINE^® 50 WG 
Ingrediente Activo: Flonicamid
Concentración: 500 g/Kg
Aditivos: c.s.p 1 Kg
Grupo químico: Pyridicecarboxamide
Formulación: Gránulos Dispersables (WG)
LogP: -0.24 (pH 7, 20°C)
Koc: 1.6
Henry’s: 4.2 X 10^-08 Pa m³ mol^-01 (25°C)
GUS: 0.16
Solubilidad: 5200 mg/L (20°C, agua)
BFC: Bajo riesgo
Peso Molecular: 229.16 g/mol
IUPAC: N-cyanomethyl-4-(trifluoromethyl)nicotinamide
Estabilidad: El producto presenta estabilidad bajo condiciones normales de almacenamiento. Deben evitarse mezclas con productos muy ácidos y/o muy alcalinos.
Uso: Insecticida Agrícola
Número de Registro: 147
Categoría Toxicológica: III LIGERAMENTE PELIGROSO 
Importado y Distribuido por: HELM ANDINA SAS

Usos registrados y recomendaciones de uso: